El agravio comparativo laboral es un problema que debemos conocer y combatir.
Cuando hablamos de agravio comparativo, básicamente, nos referimos a aquellas situaciones en las que, existen diferencias notables en cuanto a salarios, promoción dentro de la empresa u otras condiciones en trabajadores desempeñar las mismas tareas, lo que supone una discriminación entre los trabajadores.
En este artículo analizaremos todos los puntos clave del agravio comparativo laboral. Explicaremos qué es, cuáles son las causas para que se produzca esta conducta dentro de las diferentes empresas u organizaciones y cuáles son sus consecuencias.
También veremos qué puede hacer el trabajador al respecto si sufre una situación de agravio comparativo en su puesto de trabajo. Quédate por aquí y acompáñame.
¿Qué se entiende por agravio comparativo laboral?
El agravio comparativo laboral es un concepto que se refiere a una situación en la que un trabajador percibe que está siendo tratado de manera injusta o discriminatoria en comparación con otros empleados en su lugar de trabajo.
Este término se utiliza cuando un trabajador siente que hay una disparidad en cuanto a condiciones laborales, salarios, beneficios, oportunidades de ascenso u otros aspectos laborales, en comparación con otros compañeros de trabajo que realizan sus mismas tareas o funciones.
Los trabajadores que sienten que están sufriendo agravio comparativo laboral pueden tomar medidas legales o buscar recursos internos dentro de la empresa, como presentar quejas formales o buscar mediación para resolver el problema.
¿Cuáles son las características del agravio comparativo laboral?
El agravio comparativo en el ámbito laboral puede presentar una serie de características que pueden variar de una situación a otra. Sin embargo, casi todas tienen rasgos comunes.
A continuación, vamos a ver algunas de las que más se repiten.
Trato discriminatorio
Se refiere a diferencias injustificadas en aspectos como salarios, beneficios, oportunidades de promoción, condiciones de trabajo, horarios, entre otros, entre empleados que desempeñan funciones muy similares o idénticas.
El agravio comparativo puede ser por múltiples e injustificables motivos, como género, edad, raza, orientación sexual, religión, discapacidad u otras características protegidas por la ley.
Funciones y responsabilidades similares
Ocurre cuando dos o más empleados desempeñan roles laborales equivalentes en términos de responsabilidades, competencias requeridas y nivel de experiencia, pero reciben un trato desigual en aspectos laborales.
Falta de justificación objetiva
Las diferencias que causan el agravio comparativo carecen de justificación razonable u objetiva.
Es decir, no están basadas en diferencias legítimas de desempeño, productividad, experiencia o cualquier otro factor relevante para la toma de decisiones laborales.
Vulneración de derechos laborales
El agravio comparativo laboral puede implicar una violación de los derechos laborales y las leyes antidiscriminatorias establecidas en nuestro país.
Recordemos que uno de los principios que se plasma en todo nuestro ordenamiento jurídico es la no discriminación.
Sentimiento de injusticia
La percepción de los empleados afectados es crucial en el agravio comparativo. Puede ser subjetiva, pero si un trabajador siente que está siendo tratado injustamente en comparación con otros colegas en circunstancias similares, puede considerarse un agravio comparativo.
Esto puede repercutir negativamente en el trabajador, causándole sentimientos de desmotivación, inferioridad o inseguridad.
De todas formas, debemos recordar que cada situación de agravio comparativo laboral puede ser única y que las características específicas.
Marco legal del agravio comparativo laboral en España
En nuestro ordenamiento jurídico, el agravio comparativo laboral se encuentra regulado en diferentes normas y leyes.
Vamos a ver a continuación algunas de las más relevantes.
Estatuto de los Trabajadores
El Estatuto de los Trabajadores alude a la igualdad de trato y no discriminación entre trabajadores en varios de sus preceptos.
En su artículo 4 se establece que «no podrá producirse discriminación alguna en el trabajo, ni directa ni indirecta, por razón de sexo, estado civil, edad dentro de los límites marcados por esta Ley, origen racial o étnico, condición social, religión o convicciones, ideas políticas, orientación sexual, afiliación o no a un sindicato, así como por razón de lengua, dentro del Estado español«.
Asimismo, este artículo indica que «las diferencias de trato basadas en cualquiera de las condiciones anteriormente mencionadas solo serán lícitas cuando la igualdad de trato no sea exigible de acuerdo con la naturaleza de las tareas a realizar y las condiciones en que se llevan a cabo, y sean proporcionadas a dicha finalidad».
Jurisprudencia y tratados internacionales
La jurisprudencia española ha sentado importantes precedentes en casos de agravio comparativo laboral.
Los tribunales han tomado decisiones relevantes al resolver situaciones en las que se ha observado discriminación salarial o diferencias injustificadas en las condiciones laborales entre trabajadores en circunstancias similares.
Además, España es parte de varios Tratados Internacionales que promueven la protección de los derechos laborales y la igualdad en el entorno de trabajo.
Uno de estos acuerdos es el Convenio 100 de la Organización Internacional del Trabajo, el cual se enfoca en equiparar las remuneraciones entre hombres y mujeres, buscando asegurar la igualdad salarial.
Legislación nacional y derechos laborales
La Ley de Igualdad Efectiva entre Mujeres y Hombres tiene como objetivo principal fomentar la igualdad de género en el ámbito laboral.
Busca asegurar que no haya discriminación por motivos de sexo y establece medidas para facilitar la conciliación entre la vida laboral y familiar, además de promover la corresponsabilidad entre ambos géneros.
Por otro lado, los Convenios Colectivos son herramientas legales importantes, ya que regulan las condiciones de trabajo en sectores específicos.
Estos convenios tienen la capacidad de incorporar cláusulas destinadas a prevenir cualquier tipo de agravio comparativo y a impulsar la igualdad de oportunidades entre los trabajadores.
Ejemplos de agravio comparativo laboral
El agravio comparativo laboral ocurre cuando hay diferencias injustas o discriminatorias en las condiciones de trabajo entre empleados que realizan funciones similares o iguales.
Aquí tienes algunos de los ejemplos más comunes:
- Salarios desiguales: Dos empleados con la misma experiencia, habilidades y responsabilidades reciben salarios diferentes sin una justificación clara, como diferencias de género, raza o edad.
- Beneficios discrepantes: Empleados en roles idénticos reciben beneficios distintos, como planes de seguro médico, vacaciones, bonificaciones u otros incentivos laborales.
- Oportunidades de ascenso o desarrollo: A pesar de tener la misma competencia y experiencia, un empleado es promovido o recibe oportunidades de desarrollo, mientras que otro en una situación similar es ignorado sistemáticamente.
- Condiciones laborales diferentes: Empleados que realizan el mismo tipo de trabajo tienen condiciones laborales distintas, como horarios de trabajo, flexibilidad laboral o condiciones de trabajo inseguras.
- Trato discriminatorio: Comportamiento discriminatorio o abusivo por parte de los superiores hacia ciertos empleados debido a su origen étnico, género, orientación sexual o cualquier otra característica protegida por la ley.
¿Cómo puede la empresa identificar situaciones de agravio comparativo laboral?
Como ya hemos visto anteriormente, es decisivo entender bien lo que supone el agravio comparativo dentro del ámbito laboral para poder identificarlo.
Sin embargo, esto no es solo competencia del propio trabajador, sino también de la empresa.
Vamos a ver a continuación algunas de las acciones más efectivas para poder identificar el agravio comparativo laboral:
- Revisar las disparidades salariales entre empleados que ocupan el mismo cargo o desempeñan funciones similares en un equipo o departamento.
- Evaluar los distintos beneficios otorgados a los trabajadores, como flexibilidad horaria, opciones de teletrabajo o días adicionales de descanso, entre otros.
- Verificar si todos los empleados han recibido igual formación al ingresar a la empresa, si se les ha proporcionado la misma información y si cuentan con igual tiempo y recursos para realizar sus labores.
- Priorizar una comunicación interna efectiva para detectar casos donde algún trabajador pueda sentir que no recibe un trato equitativo o las mismas oportunidades que sus colegas.
El agravio comparativo: ¿es un delito denunciable?
El término «agravio comparativo» describe cuando un empleado se siente menos valorado o infravalorado en comparación con otros.
Aunque no constituye un delito per se (no existe el delito de agravio comparativo), su uso puede ser motivo de denuncia en entornos laborales, especialmente si surge por discriminación debido a género, edad, raza, orientación sexual u otros aspectos protegidos legalmente.
Es imprescindible que las empresas establezcan políticas claras para prevenir este tipo de agravios y aborden cualquier queja con seriedad y prontitud.
¿Cómo denunciar el agravio comparativo en el lugar de trabajo?
Cuando se percibe discriminación en el entorno laboral en aspectos como salario, promoción o trato comparativo con otros colegas, es fundamental tomar acción.
La mejor vía suele ser presentar una queja formal al departamento de recursos humanos de la empresa o conversar con un supervisor de confianza.
Es esencial respaldar la denuncia con pruebas sólidas y proponer soluciones concretas para resolver la situación.
Si la empresa no toma medidas adecuadas, buscar asesoramiento legal y presentar una queja ante los organismos reguladores, puede ser la siguiente instancia a considerar.
¿Cómo denunciar las situaciones de agravio comparativo laboral?
En situaciones de agravio comparativo en el ámbito laboral, es crucial tener procedimientos claros para reportar y abordar el problema.
Estos son algunos pasos a seguir:
- Recopilar pruebas: Obtener pruebas concretas o evidencias que respalden la existencia de trato desigual comparado con otros colegas.
- Revisar el convenio colectivo: Consultar el convenio colectivo de la empresa para comprender los derechos y responsabilidades del empleado afectado.
- Comunicar la situación: Informar al departamento de recursos humanos o a superiores sobre el agravio y presentar una queja formal.
- Considerar mediación: Si no hay una respuesta satisfactoria, buscar mediadores internos o externos, como el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) o servicios de mediación laboral.
- Evaluar opciones legales: Si los intentos anteriores no resuelven la situación, se puede contemplar la posibilidad de iniciar acciones legales ante los tribunales laborales.
