En los últimos años, los animales exóticos se han puesto de moda en el mundo de las mascotas, pero es importante conocer las implicaciones legales de poseer estas criaturas.
Una de las mascotas exóticas más cotizadas es el mono, pero ¿es legal tener uno como animal de compañía en España? ¿Qué problemas puedo tener si tengo uno? Antes de tomar ninguna decisión, es importante conocer las leyes y normas que rigen la tenencia de estos animales en nuestro país, así como los riesgos que conlleva tener uno.
En este artículo exploraremos la legislación sobre bienestar animal en España, qué problemas puedes tener si tienes un mono como mascota y si simplemente es legal tener un mono de mascota en nuestro país o no.
Legislación sobre Bienestar Animal en España
El debate sobre el bienestar animal en España viene de lejos, con varias asociaciones haciendo campaña a favor de una normativa más estricta que proteja los derechos de los animales y cada vez más personas concienciadas sobre el tema.
Se han denunciado muchos casos de criaturas mantenidas en cautividad y en condiciones indeseables, incluidos primates mantenidos ilegalmente como mascotas en hogares españoles.
No obstante, con la Ley de Bienestar Animal se han realizado ciertos avances en la legislación que, en teoría, podrían suponer cambios en la tenencia y cría de ciertos animales. Numerosas organizaciones protectoras de animales en España están instando a que se prohíba totalmente la tenencia de especies exóticas por considerar que estos animales solo pertenecen a su hábitat natural y a ningún otro lugar.
En España, tener un mono como mascota está totalmente prohibido y solo se pueden tener estos animales en cautividad en zoos o centros de conservación e investigación.
Si se descubre a una persona con un primate como mascota, podría enfrentarse a penas severas, incluidas multas e incluso el encarcelamiento.
¿Se puede tener un mono de mascota en España?
Tal y como acabamos de ver, la tenencia de monos como animales de compañía está prohibida en España. Sean cuales sean las intenciones de cada uno, cualquier intento de adoptar o comprar un mono para tenerlo en cautiverio podría acarrear graves repercusiones. Además, el mercado negro de primates para la industria de animales de compañía es un problema mundial que tiene graves consecuencias para las poblaciones salvajes de estos animales.
Es importante tener en cuenta el bienestar de cualquier animal que se tenga como mascota. Los primates, en particular, requieren cuidados especializados. Por tanto, el tener un mono en cautiverio como mascota es una grave violación del bienestar animal y debe evitarse en cualquier circunstancia.
Actualmente, solo se pueden tener monos en cautiverio bajo muy determinadas situaciones, como en zoológicos, centros de conservación de especies o de protección animal.
¿Puedo adoptar un mono?
La respuesta es sí, pero no de la forma que tú te piensas.
Tal y como hemos visto, la tenencia de ciertas especies en cautiverio por particulares está totalmente prohibida en España.
Sin embargo, si tu sueño es tener un mono como mascota, es posible la adopción o el apadrinamiento de un mono de un zoológico, de un centro especializado para la conservación de la fauna, etc.
Estos lugares en gran parte sobreviven gracias a las donaciones monetarias de la gente, que ayudan colaborando y apadrinando animales. En muchas ocasiones, estos centros también permiten a los «padrinos» de los animales visitas, encuentros, etc., pero siempre dentro del centro en cuestión y con las medidas adecuadas.
¿Cuál es la multa por tener un mono de mascota?
Tener un mono en cautividad, al igual que cualquier otra de las especies de animales exóticos, puede conllevar fuertes multas que pueden llegar a los 100.000 euros.
Mientras que el simple hecho de tener un animal prohibido, como un mono en casa, se consideraría una infracción leve, y el castigo sería una multa de entre 600 y 30.000 euros, criar animales de especies exóticas podría conllevar una multa de hasta 100.000 euros, ya que, estaría considerada una infracción muy grave.
Ventajas y desventajas de tener un mono como mascota
Tener un mono como mascota puede ser una experiencia estimulante, puesto que son animales inteligentes y activos que pueden proporcionar compañía. A pesar del atractivo de una criatura así, es importante tener en cuenta las desventajas que conlleva.
Los monos exigen una gran cantidad de atención, cuidados y enseñanza, lo que puede llevar mucho tiempo y ser exigente para quienes no estén preparados para esta tarea. Además, los primates pueden ser hostiles, y su comportamiento puede ser impredecible, constituyendo una amenaza potencial para el dueño y otras personas de los alrededores.
Además, cabe la posibilidad de que los monos también puedan contagiar ciertas enfermedades que pongan en riesgo la salud de sus dueños.
Por otra parte, tener un mono como mascota también tiene sus ventajas.
Los monos son animales sociables que pueden formar vínculos sólidos con sus dueños, y pueden ofrecer ayuda emocional y consuelo. Además, los primates son muy inteligentes y se les puede educar para realizar diversos trabajos, como traer objetos, abrir puertas e incluso ayudar a personas con discapacidades. Además, tener un mono como mascota puede ser una experiencia única y agradable, ya que permite a los propietarios adquirir conocimientos sobre estos cautivadores animales y su conducta.
Es fundamental tener en cuenta que tener un mono como mascota requiere un compromiso económico considerable. Los monos tienen necesidades alimentarias específicas y necesitan mucho espacio para moverse y jugar. Además, los primates requieren cuidados veterinarios regulares, que pueden ser costosos. Los gastos relacionados con tener un mono como mascota deben tenerse en cuenta antes de decidirse a adoptar uno.
Por último, es esencial recordar y comprender que tener un mono como mascota es ilegal en muchos países, incluido España. Incluso en los países donde está permitido, tener un mono como mascota es un tema controvertido, ya que suscita preocupaciones éticas sobre el bienestar de estas criaturas.
Es imperativo investigar y comprender las leyes y normativas sobre tener un mono como mascota antes de tomar una decisión.