En el ámbito del derecho español, dos términos fundamentales que se utilizan para describir la toma de decisiones en distintos contextos son la «mayoría absoluta» y la «mayoría simple«.
Ambos conceptos son cruciales en el funcionamiento de instituciones, organismos y procesos legislativos, además que, tras las elecciones del 23 J parecen estar especialmente de moda.
En este artículo iremos al grano y veremos de forma sencilla y directa la diferencia entre mayoría simple y absoluta.
Mayoría Absoluta
La mayoría absoluta es una forma de mayoría que requiere obtener más de la mitad de los votos emitidos o de los miembros presentes en una votación.
Es decir, para alcanzar la mayoría absoluta, la opción o propuesta en cuestión debe obtener al menos la mitad más uno de los votos. En términos porcentuales, esto se traduce en obtener más del 50% de los votos válidos.
Mayoría Simple
Por otro lado, la mayoría simple es una forma de mayoría menos exigente en comparación con la mayoría absoluta.
Para alcanzar la mayoría simple, una opción o propuesta solo necesita obtener más votos a favor que en contra, dicho de otro modo, más síes que noes, sin importar el porcentaje total de votos obtenidos. En esencia, la opción con mayor apoyo relativo es la que resulta ganadora.
Pongamos un ejemplo para verlo mejor: si un parlamento que cuenta con 100 diputados, ante una propuesta, esta obtiene 40 votos a favor, 30 votos en contra y 30 abstenciones, la propuesta, pese a «solo» haber recibido 40 votos, sería aprobada, ya que supera en número a los votos en contra, a pesar de no alcanzar la mitad del total de votos.
¿Qué es la mayoría cualificada?
La mayoría cualificada en el derecho español es un tipo de mayoría que exige alcanzar un umbral específico de votos más alto que la mayoría simple para aprobar ciertas decisiones importantes.
Este umbral se expresa generalmente en términos de un porcentaje del total de votantes o miembros presentes, y se utiliza en situaciones donde se busca garantizar un consenso más amplio antes de aprobar una medida significativa.
Normalmente, una mayoría cualificada requiere un porcentaje del 60%, o 2/3 o 3/5 de los votos emitidos a favor.
Aplicaciones en el Derecho Español
Tanto la mayoría absoluta como la mayoría simple tienen aplicaciones en diferentes áreas del derecho español, como el funcionamiento de los órganos legislativos, la toma de decisiones en asociaciones, entidades gubernamentales y otros ámbitos de la vida cotidiana.
A continuación, se enumeran algunas de las aplicaciones y usos más comunes:
Parlamento y Legislación
En las Cortes Generales (Congreso de los Diputados y el Senado ), las votaciones para la aprobación de leyes, enmiendas constitucionales y elecciones para cargos específicos pueden requerir la mayoría absoluta, cualificada o simple de los miembros de la cámara.
La mayoría absoluta requiere el voto favorable de la mitad más uno de los diputados de la Cámara y la mayoría simple requiere más síes que noes.
Una mayoría cualificada puede entenderse como 3/5 o 2/3 del voto favorable de los miembros de la Cámara.
Elecciones
Cuando hablamos de elecciones generales, municipales y autonómicas a menudo escuchamos los términos de mayoría simple y absoluta.
Cuando un candidato consigue la mayoría absoluta de los votos, es decir, el 50% más uno, su investidura como presidente del gobierno, presidente de la comunidad o alcalde no peligra.
Sin embargo, si gana las elecciones con mayoría simple, esto quiere decir que ha sido el candidato en el que el electorado ha depositado mayoritariamente su confianza y voto, pero esto no le garantiza su investidura, ya que, se puede dar el caso de que los demás candidatos y partidos, aun siendo menos votados se unan para gobernar, y consigan sumar más escaños entre todos que el candidato más votado.
Asociaciones y Juntas directivas
En asociaciones, colegios, o entidades, las votaciones para elegir directivas, adoptar decisiones importantes o modificar estatutos pueden requerir la mayoría absolutas o simples, dependiendo de lo establecido en sus normativas internas.
Procesos de Referéndum
En ciertos referéndums, como los que involucran cambios constitucionales o temas trascendentales, puede requerirse una mayoría absoluta o incluso cualificada para validar la decisión, traduciéndolo así como un claro gesto de confianza y apoyo del pueblo a la pregunta del asunto del referéndum.
Asambleas y Reuniones
En diversos contextos, como asambleas de ciudadanos, reuniones de consejos, juntas de vecinos o corporaciones, las decisiones pueden tomarse a través de las mayorías simples o absolutas, dependiendo de la naturaleza de la votación.
En resumen, la diferencia entre la mayoría absoluta y la mayoría simple en el derecho español radica en los requisitos para alcanzar la victoria en una votación.
La mayoría absoluta exige obtener más de la mitad de los votos totales, mientras que la mayoría simple solo requiere tener más votos a favor que en contra.
Ambos conceptos son fundamentales en la democracia y el proceso de toma de decisiones, y se aplican en diversos contextos para asegurar un funcionamiento equitativo y eficiente de las instituciones y organismos en España.